OPINIÓN. Derechas en guerra

Adela Segura, secretaria de Política Municipal del PSOE de Almería
Adela Segura, secretaria de Política Municipal del PSOE de Almería

Vox se siente insultado y pide una disculpa. El líder del PP le ha llamado ‘ultraderecha’ y les ha dolido. Ahora sí. Ahora el PP de Casado se ha decidido a hablar de las cosas por su nombre. No lo hizo el 2 de diciembre porque necesitaba a los ‘ultras’ para entrar en San Telmo a toda costa. A Casado le hemos oído decir muchas cosas y no todas dotadas de sentido pero, en esta ocasión, si de verdad cree que Vox es la extrema derecha mucho tarda ya en romper con ellos en Andalucía. Los socialistas le pedimos coherencia y que rompa el pacto de la vergüenza con Vox, porque si no lo hace no será creíble; una vez más.

Y no lo sería porque ahora llama ‘ultraderecha’ a quienes estaba dispuesto a dar ministerios después del 28 de abril, porque creía que en el resto de España íbamos a tener la misma mala suerte de lo que, por desgracia, han hecho en Andalucía. Con esta actitud desde Génova, el gobierno de Andalucía ha sido desautorizado. Y esto tiene sus consecuencias inmediatas. Tanto que Vox ya ha dicho que no se sentará a negociar un presupuesto con quien le insulta, porque Vox considera que llamarles ‘extrema derecha’ es una ofensa cuando otros siempre lo hemos visto una realidad palpable. Otros, sin embargo, han preferido callar y así nos va. Han guardado silencio hasta ahora.

Así, tras las palabras de Casado, si el PP no rompe su acuerdo con la extrema derecha en Andalucía, estaremos ante un ejercicio de cinismo y de hipocresía sin precedentes. Moreno Bonilla se convertirá en un gran cínico además de ser el primer presidente de Andalucía del tercer partido de la comunidad. Ha quedado absolutamente desautorizado por su partido y, si le quedara algo de dignidad y coherencia, y fuera capaz de salir de la madriguera en la que se ha metido desde el 28 de abril, rompería hoy mismo el acuerdo de gobierno que tiene firmado con la extrema derecha.

Hace mucho tiempo que el PP perdió la credibilidad. ¿Cómo se va a creer la gente en España ahora que digan que Vox es un partido de ultraderecha cuando es el que tiene la sartén por el mango y quien sostiene al Gobierno de Andalucía de PP y Ciudadanos? Hay que ser creíble y honesto en lo que se dice y en lo que se hace. Los socialistas lo somos. Las últimas citas electorales han demostrado que la gente quiere un gobierno socialista, que sabe muy bien el significado de su política y de sus siglas.