El grupo municipal socialista advierte de las maniobras especulativas del PP de Almería sobre la Alcaldía de la capital costera del Levante almeriense
“No vamos a permitir que los garrucheros pierdan un metro o un euro de su patrimonio común para que el peor ejemplo de hasta dónde puede llegar la perversión de la política cure sus frustraciones accediendo a una Alcaldía para la que no tiene el voto de los ciudadanos. No vamos a permitir que nadie sea alcalde por un día a cambio del suelo urbano de Garrucha”.
El PSOE de Garrucha es tajante ante los movimientos que, desde el PP de Almería y el concejal tránsfuga Álvaro Ramos, se llevan a cabo para burlar la decisión del TSJA y provocar un cambio en la Alcaldía antes de que el alto tribunal de apelación andaluz cierre la puerta, “como lo ha hecho con la sentencia de Turre, precisamente para evitar que quienes violan la voluntad popular haciendo un uso absolutamente mercenario del voto que se les dio bajo unas siglas puedan usar ese poder en beneficio propio”, concluyen.
El grupo municipal socialista anuncia que pondrá todos sus recursos, jurídicos y organizativos, a disposición de quienes estén dispuestos a hacer frente común para la defensa de los intereses del municipio: “Daremos apoyo a quienes se sumen o estén dispuestos a dar la cara para que nuestro suelo público revierta directamente en viviendas para los jóvenes y las familias que quieren quedarse aquí. No podemos permitirnos que las ansias de especulación de unos pocos cercenen las posibilidades de la generación que más dificultades está encontrando para acceder a una vivienda digna, de vivir en su pueblo. Precisamente su pueblo, Garrucha, tiene bolsa de suelo suficiente para garantizar ese derecho del que nos habla el artículo 47 de la Constitución española”.
Los socialistas garrucheros recuerdan que Álvaro Ramos, actual concejal de Urbanismo y a quien el PP está dispuesto a entregar la Alcaldía si los terrenos de Vista Alegre entran en la ecuación, fue elegido como concejal de Adelante Andalucía y que, antes del pleno de investidura, ya había dejado de estar en esa formación, pactando con PP y Vox frente al partido más votado y con mayor número de concejales, que fue el PSOE. En solo dos años de legislatura, Ramos ya acumula tres demandas —una en vía penal— por acoso laboral a personal del Ayuntamiento de Garrucha, y la cesión de la Alcaldía con los votos del PP ocasionaría una crisis sin igual en la Casa Consistorial.
