ROQUETAS DE MAR. El PSOE critica que Amat siga apostando por “más ladrillo y hormigón” con el impulso de la urbanización de Las Salinas

Manolo García, portavoz socialista en el Ayuntamiento de Roquetas de Mar
Manolo García, portavoz socialista en el Ayuntamiento de Roquetas de Mar

El portavoz del Grupo Socialista, Manolo García, advierte del error de seguir centrando el desarrollo de Roquetas en un “urbanismo desfasado”

El portavoz del Grupo Socialista en el Ayuntamiento de Roquetas de Mar, Manolo García, ha vuelto a apelar al “sentido común” de Gabriel Amat, ante los nuevos pasos que se pretenden dar para impulsar el proyecto de urbanización de Las Salinas con la aprobación de la innovación al PGOU que divide el sector para empezar a desarrollarlo por fases.

Para el dirigente socialista “la apuesta por la construcción y no por otros sistemas productivos ha traído graves consecuencias, siendo Roquetas uno de los municipios más afectados por la burbuja inmobiliaria y que pasó mayores dificultades para afrontar la crisis”.

Por ello, desde el PSOE sigue sin entenderse la postura de Amat de “pretender seguir apostando por ese modelo económico”, algo que en opinión del portavoz socialista, “solo puede explicarse como el favor que el alcalde le debe a los propietarios de los terrenos afectados por la innovación, que podrán regularizar los balances contables de sus empresas con nuevos activos que hasta ahora carecían de valor en el mercado inmobiliario”. Para los socialistas “esta es la justificación de que el sector se haya dividido en 4 unidades de ejecución y que en estos momentos se pretenda desarrollar exclusivamente la primera de ellas, casualmente donde se localizan los terrenos de esas empresas”.

El Partido Socialista considera que no tiene sentido impulsar una gran urbanización con miles de viviendas cuando todavía hay 4.000 viviendas vacías en el municipio. Por ello, ha vuelto a insistir en la necesidad de políticas “serenas, prudentes y lógicas” para cambiar el modelo de ciudad con “una correcta planificación urbanística que prime de una vez la calidad de vida de sus habitantes y no los intereses de los promotores urbanísticos, además de apostar por la mejora de nuestros sectores productivos tradicionales, la agricultura y el turismo, y por buscar otros basados en las nuevas tecnologías o la industria auxiliar, en lugar de seguir centrándose en más ladrillo y hormigón, que nadie duda ya que es pan para hoy y hambre para mañana”.

Manolo García ha criticado que la innovación al Z-SAL-01 siga con el modelo urbanístico “tristemente conocido de la masificada Roquetas de Gabriel Amat”, con 7.000 viviendas “que hacinan a sus ocupantes” y complejos hoteleros “perfectos para seguir atrayendo turistas de pulsera con todo incluido, en lugar de un turismo de más calidad”. El modelo que propugna el PSOE es “hacer de ese entorno el paradigma de ciudad del siglo XXI en el que la convergencia de naturaleza, sostenibilidad, urbanismo, modernidad y prosperidad económica no solo no sean incompatibles sino que sean los pilares en los que se sustente el futuro de esta nueva ciudad”.

Por último, desde el PSOE se ha recordado la postura de los últimos años con respecto al Plan General de Ordenación Urbana, rechazando la táctica de las innovaciones para introducir cambios y corregir errores, en lugar de revisar por completo un documento que “está claro que se ha quedado obsoleto y que se redactó con un modelo de desarrollo completamente desfasado”.